En una cacerola (yo utilizo de barro, me gusta más como queda el sabor de la comida) pones 3 cucharadas de aceite de olivo, dejas que caliente un poco y fríes todos los mariscos, los tapas y dejas que se frían unos 5 minutos, moviendo constantemente. Le incorporas el ajo y la cebolla, y los dejas freír bien otros 5 minutos.
Mientras licuas el jitomate, la sal la pimienta, el ajo molido, el azafrán y 5 cucharadas de agua al tiempo. Cuando los mariscos cambien a color naranja, le agregas la mezcla y lo revuelves muy bien para que se integre todo y sazone otros 2 minutos más. Con un poco del agua caliente quitas el residuo del puré de tomate del vaso licuador y lo agregas junto con el resto de las 2 tazas de agua, y toda la verdura. Lo tapas y dejas que se cueza todo durante 12 minutos, moviendo de vez en cuando.
En el inter de este tiempo, en un sartén agregas las otras 2 cucharadas de aceite y fríes un poco las 2 tazas de avena, unos 2 minutos. En otro recipiente pones a hervir la piña, con el agua y la stevia, durante unos 7 minutos o hasta que se haga el almíbar, si te gusta con más liquido puedes ponerle más agua.
Ya que pasaron los 12 minutos, integras la avena a los mariscos y verduras. Bajas la flama a lo mínimo que puedas, mezclas todo constantemente y en unos 5 minutos o cuando ya esté seca y cocida la avena, tendrás lista tu deliciosa Paella-Avena. Ya que la piña se enfríe, la cuelas, y el almíbar lo pones en medio de la mesa para que se lo pongan a la paella a su gusto.
Decoras el plato con los pedazos de piña como lo presenta la foto. Esta paella es magra, por lleva menos aceite que la de arroz. Ideal para hipertensos, ya que contiene poca sal. Nutritiva por la avena, las verduras y los mariscos. Y más práctica porque se hace en la mitad del tiempo.