Se coloca en la licuadora los 200g de avena para molerla hasta que se haga polvito (harina). En un bowl o recipiente grande se coloca el harina de avena, el polvo de hornear y la mantequilla a temperatura ambiente para poder amasar los ingredientes.

Una vez mezclados, se agrega el queso parmesano rallado muy fino, un huevo entero, la yema del otro y la mostaza revolviendo con una cuchara para después amasar.

En la superficie de la mesa limpia se espolvorea un poco de harina de trigo y se sigue amasando la mezcla unos minutos más. Esta masa se envuelve en una bolsa y se refrigera por 30 minutos.

Al salir del refrigerador se espolvorea nuevamente un poco de harina de trigo y se extiende la masa con un rodillo de manera que quede un cuadro de 20 x 20cm con 1cm de grosor, es tan manejable que con las manos se puede dar forma fácilmente.

Se corta con un cuchillo a lo largo para formar barritas (tu elijes el tamaño) y se colocan en una charola con papel encerado. Antes de meter al horno con la clara de huevo que sobró barnizamos y ahí es donde la imaginación y el sabor fluyen pues en la superficie puedes colocarle, ajo picadito, ramitas de albahaca, arandanos, cebolla caramelilzada ya que la avena combinada con el queso es ideal para el sabor dulce o salado, incluso puedes agregar a la masa chispas de chocolate, por qué no!

Se mete la charola al horno convencional o eléctrico a 250°F por 20 minutos y al salir se dejan enfriar.

TIPS: Puedes hacer un pure de tomate como para remojarlos o una salsita de tamarindo o hasta bañarlos con un poco de miel de abeja.

Si quieres más sabor a ajo o cebolla puedes usar polvo de ajo o cebolla SIN sal porque el queso parmesano ya es salado.

Estas barritas de avena con parmesano son ideales para entradas, puedes cortarlas pequeñas y usarlas como crutones en ensaladas o cremas, solitas como snacks y no pueden faltar en una reunión con amigos y un buen vino tinto, te van a encantar!